La ceremonia, realizada el día 30 de abril, contó con la presencia del rector Rodrigo Vidal Rojas y la vicerrectora de Vinculación con el Medio, Ana María Fernández Tapia, quienes entregaron los reconocimientos a académicas, académicos, egresadas y egresados que se han destacado en la contribución al desarrollo de la sociedad desde sus diversos ámbitos sociales.
Docentes Usach participan de la confección de Hoja de Ruta de Economía Circular en Chile
Alexandre Carbonnel Torralbo, director del Laboratorio de Exploración en Materiales Arquitectónicos Ambientales (LEMAA), señala que “al igual que lo hemos vivido en la esfera cívica el último año en Chile con el plebiscito, la economía circular establece un nuevo contrato, que a la larga reestructura toda nuestra manera de entender la relación entre materias primas, sistema de producción, consumo y desechos”.
Docentes de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Santiago de Chile participaron en la confección de Hoja de Ruta de Economía Circular en el país, iniciativa impulsada por el Ministerio del Medio Ambiente.
La participación de los docentes de la Casa de Estudios fue gestada gracias a la articulación con Alianza Basura Cero, que tiene como objetivo promover y trabajar activamente por el manejo sustentable de los residuos sólidos urbanos -bajo el enfoque de Basura Cero-, tanto en Chile como en el mundo.
La Red está integrada actualmente por personas naturales, organizaciones sociales y comunitarias -autónomas e independientes-, además de universidades públicas.
Cabe señalar que, desde sus inicios, la Unidad de Vinculación con el Mundo Público y Social de la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio representa a la Universidad de Santiago de Chile en esta instancia.
En ese sentido, el Ministerio de Medio Ambiente invitó a la Alianza Basura Cero a participar en la confección de Hoja de Ruta de Economía Circular en Chile.
Yennie Sánchez Contreras, profesional de la Unidad responsable de la representación institucional en la Alianza, afirma que "nos es muy grato que nuestro trabajo de participación en redes en articulación con la academia permita el aporte a la construcción de Políticas Públicas sobre materias tan importantes y urgentes como es la Sostenibilidad",
Junto a ello, agradece “el espacio que nos brindó la Alianza Basura Cero en esta convocatoria y el alto compromiso de nuestros y nuestras académicas por aportar a instancias necesarias para el avance de nuestro país".
Hacia un nuevo modelo
La Economía Circular implica un cambio substancial en las maneras de producción y consumo, planteando la necesidad de abandonar una lógica que implique extraer-producir-consumir-botar, para transitar hacia un modelo en donde los materiales que conforman el ciclo económico puedan aprovecharse el mayor tiempo posible. Incluso, de manera indefinida.
En este contexto, por ser parte de la Alianza, la Universidad se sumó en esta importante instancia, a través de la participación de los docentes de la Escuela de Arquitectura, Alexandre Carbonnel Torralbo -en la Mesa de Prevención- y Hugo Pérez Herrera -en la Mesa de Ecodiseño-, ambos investigadores del Laboratorio de Exploración en Materiales Arquitectónicos Ambientales (LEMAA).
De acuerdo con Hugo Pérez Herrera, la participación en esta instancia fue “tremendamente provechosa”, destacando que la experiencia sirvió “tanto para conocer que se estaba haciendo en relación con el ecodiseño desde empresas consolidadas, emprendimientos, Estado y academia, como para evaluar los pasos que son necesarios de dar en este ámbito, dentro de lo cual nos falta mucho”.
Al ser consultado sobre el principal desafío pendiente en torno a la Economía Circular en Chile, considera que es fundamental “fortalecer una idea de ‘industria manufacturera 4.0’, que trabaje con materia prima secundaria obtenida del reciclaje”.
Desafiar el statu quo rentista
En tanto, Alexandre Carbonnel Torralbo, director del Laboratorio de Exploración en Materiales Arquitectónicos Ambientales (LEMAA), señala que el participar en la Mesa de Prevención de la Hoja de Ruta de la Economía Circular para Chile, ha sido una oportunidad muy positiva.
“Esta iniciativa busca sentar las bases a nivel nacional para los próximos 20 años sobre la importancia de reestructurar nuestro sistema económico y de producción acorde a los desafíos socio-ambientales. La posibilidad de abordar intersectorialmente estos desafíos país fue sin duda una experiencia desafiante y necesaria”, afirma.
También, enfatiza en que la Hoja de Ruta fue integrada por un heterogéneo grupo de actores, lo que le otorga una validación muy importante.
“En esta ocasión el Ministerio del Medio Ambiente logró articular una serie de actores relevantes para discutir y conciliar una mirada común sobre los desafíos del país. Finalmente, de lo que estamos hablando aquí es de una modelo que se ha impulsado últimamente con el nombre de Economía Circular, pero que en esencia desafía el statu quo rentista del modelo de desarrollo y económico de mercado”.
En ese sentido, añade que “al igual que lo hemos vivido en la esfera cívica el último año en Chile con el plebiscito, la economía circular establece un nuevo contrato, que a la larga reestructura toda nuestra manera de entender la relación entre materias primas, sistema de producción, consumo y desechos”.
Adicionalmente, considera imprescindible “que los consumidores dejen de serlo y se transformen en sujetos conscientes de sus hábitos y de su poder para determinar un sistema de bienes y mercancías sustentables y responsables con la sociedad y el territorio”.
También, considera que, en este escenario, otro actor claves son las empresas y el sector empresarial.
“Las empresas en transición y las del futuro no podrán basarse sólo en objetivos de rentabilidad, deberán asumir el rol que cumplen como motor del desarrollo de las personas y la sociedad en un sentido amplio. Los costos sociales, ambientales, políticos, etc., deberán ser visto como una oportunidad para que los servicios y productos que entreguen generen un impacto sustentable e integral. Su público objetivo ya no serán los consumidores, serán los ciudadanos, lo cual implica un compromiso ya no solo económico, sino principalmente político, ambiental y cultural”, concluye.