Expertos Usach recalcan en la voluntad del paciente y la dignidad de adultos mayores en medio de la crisis del Covid-19

El lunes 13 de abril, vía Zoom, se realizó el panel “COVID-19 y personas mayores”, iniciativa organizada por la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago de Chile. Los ciclos se realizarán periódicamente y serán informados por los canales institucionales de dicha unidad mayor.

La actividad contó con la participación del jefe de programa de la especialidad de geriatría de la Usach, Dr.  Humberto Montecinos, y el académico de Salud Pública y asesor de la OMS en adulto mayor y coronavirus, Pablo Villalobos. Además, participó la decana de la Facultad de Ciencias Médicas Usach, Dra. Helia Molina.

En su intervención, el doctor Montecinos realizó un resumen de cómo ha evolucionado el desarrollo de la pandemia, tanto en el país como alrededor del orbe.

“Fuimos el cuarto país de Latinoamérica en confirmar el virus (…) Es un virus altamente inteligente, rápidamente se multiplica y ocupa un receptor, que está muy diseminado en el intestino y en el pulmón”, señaló.

De acuerdo con el experto, “las personas mayores presentan fragilidad o comorbilidades que disminuyen la capacidad para combatir eficazmente infección y recuperarse”, afirmó.

Junto a ello, Montecinos enfatizó en la ruta de ingreso al cuerpo de las partículas virales. Según su relato, “el virus inhalado en forma de gotas en aerosol desencadena diferentes respuestas inmunes al adquirido al tocar superficies contaminadas y luego tocarse la cara. La nariz y el pulmón difieren en las defensas locales, por lo que la ruta de infección podría afectar significativamente el resultado”.

Voluntad del paciente

También, puso acento en la heterogeneidad de las personas mayores. De acuerdo con su análisis, fumadores, diabéticos, hipertensos, además de personas con alteraciones nutricionales, son vulnerables en este contexto, lo que “los pone en desventaja frente a cualquier epidemia”.

El especialista también enfatizó en la importancia de la ética en la actuación médica, “pero sobre todas las cosas, una valoración geriátrica integral, para tomar las decisiones adecuadas y con el consentimiento del paciente”.

“Una de las cuestiones que olvidamos es que el paciente debe dejar en vida qué es lo que quiere o querrá en caso de pasarle algo grave. Creo que es importante insistir en las directrices anticipadas y ayudar a planificar mejor los recursos.

Cada uno de los médicos debiera decir y pensar hasta donde quiere llegar.

También ante el auge de la telemedicina, el doctor señaló que el apoyo familiar es clave. Incluso, tenemos pacientes en hospitales donde tenemos que buscar dónde los acojan”.

No solo ausencia de enfermedad

Por su parte, el especialista Villalobos, puntualizó, junto con detallar las medidas tomadas hasta el momento por las autoridades, los aspectos que aún faltan por realizar en medio de esta emergencia sanitaria.

Para el especialista, es clave considerar la definición de salud que adscribe la OMS: "La salud es un estado de perfecto (completo) bienestar físico, mental y social, y no sólo la ausencia de enfermedad".

Bajo su mirada, cabe preguntarse cómo se podría compatibilizar las medidas de prevención de la pandemia con los principios del envejecimiento saludable.

Sobre lo mismo, complementa que la autoridad ha desarrollado una serie de medidas restrictivas, pero lo fundamental, estima, es evitar sobresaturar de restricciones, que finalmente impidan que estas se puedan aplicar.

En relación con el camino a seguir, considera primordial adoptar medidas de “salud” y no solo de prevención y contagio de la enfermedad.

“A corto plazo, generar medidas “espejo” para las restricciones. El manejo de la epidemia ha sido a través de la imposición de restricciones. Es puros “no”. Está bien, una primera reacción ha sido imponer restricciones que se han ido alargando en el tiempo, pero hay que pensar en cuáles son las consecuencias no deseadas de esa restricción”, afirmó.

Complementando este punto, añade que “le estamos diciendo que no salga de las casas, que no haga actividades comunitarias. En ese contexto de múltiples restricciones, tenemos que pensar cuales son las medidas del gobierno para que esas personas puedan acceder a los servicios. Cómo hacemos que dentro de esas medidas de restricción las personas puedan seguir accediendo al sistema de salud y cómo se compensa los beneficios y servicios públicos descontinuados.

¿Personas “descartables”?

Además, profundizó en el riesgo que implica considerar que las personas mayores serían “descartables” dentro de esta pandemia, poniendo como ejemplo una carta de El Mercurio. En ella, un adulto mayor, aduciendo un gesto “solidario”, señaló que cedería su puesto para que los recursos sean ocupados en otras personas.

Una de las características más relevantes de trabajar con personas mayores es que son heterogéneas. Es peligroso que se instale en la cabeza esta idea de que, si hay que priorizar y racionar recursos, los adultos mayores queden a la cola”, reflexiona.

Sobre medidas a largo plazo, señala que la crisis “ha dejado en evidencia importantes baches en el sistema de salud y la red sociosanitaria, con foco en personas mayores (…). Hay muchos problemas de información, eso ha sido un problema de tener un sistema fragmentado. Otro de coordinación del sistema, la implementación de medidas y la fiscalización”

“Tenemos un sistema, un auto que venía con problemas y al primer bache en el camino se desarma completo. Eso es lo que tenemos que evitar y tomar como lección para el futuro”, recalca.

Como reflexión final, plantea que es fundamental “repensar la salud desde una perspectiva más amplia, no solo como falta de enfermedad. También, añade “la necesidad de pensar en una segunda capa de medidas que permitan mitigar los efectos adversos de la regulación, no moverse exclusivamente hacia más restricciones”.

Síntoma clave: disnea

En la ronda final de preguntas, ante las condiciones de vulnerabilidad que se encuentran las personas mayores, la doctora Helia Molina señaló que número total de personas que están en hogares es complejo de estimar. “Solo sabemos que el 8% de la población adulta mayor está cubierta por los Establecimientos de Larga Estadía para Adultos Mayores (ELEAM) y todas las políticas del adulto mayor del SENAMA. No sabemos cuántos están en establecimientos privados o clandestinos. Es un porcentaje menor del porcentaje que lo requieren”.

Sobre las condiciones de pobreza, la decana señaló que esta “se quintuplica en los adultos mayores en relación a la población general. En la última encuesta Casen del 2017, ahí se ve que la pobreza en los adultos mayores se multiplica. Si bien las cifras parecieran muy parecidas a la población general, cuando uno entra a desagregar los datos se quintuplica la pobreza.

En tanto, el doctor Montecinos, al ser consultado sobre los riesgos de personas que abusan de sustancias y puedan contraer coronavirus, señaló que “la salud mental no tiene la cobertura que debiera tener y estas personas están en riesgo de contraer este virus. Generalmente estas personas tienen una mala nutrición, alteraciones vasculares, tienen isquemias en el cuerpo que le van a favorecer a actividad viral”.

Al ser consultado por la sintomatología del Covid-19, afirma que esta es muy variable. “Siempre nos dijeron que el paciente debe tener fiebre. Hemos tenido pacientes sin fiebre, que han tenido cefalea y tos escasa y de repente se prende todo y empiezan a toser y tiene disnea, dificultad para respirar”, subrayó.

Cuando existe un marcador como es la disnea, ese tiene que ser atentado rápidamente, ya que puede caer en un respirador artificial, porque se agotan, son un recurso finito”, agregó.

Como reflexión final, considera importante que esta coyuntura “puede ser un llamado a conciencia para fijarse en las personas que más lo requieren. Los desplazados de siempre. Las personas de edad están siendo un foco de atención, que son los que sufren, pero también son los que van a contagiar, las personas pobres, los que viven en las calles, que no tienen ningún elemento de protección, es porque la sociedad está construida injustamente y estamos viviendo esto”.